Ana Salvador: “A día de hoy tengo la suerte de poder dedicarme plenamente a la montaña y la nieve”
Ana Salvador es una destacada deportista española originaria de Huesca, especializada en splitboard, una modalidad que combina el snowboard y el esquí de travesía. Su pasión por las montañas la ha llevado a realizar expediciones en diversas cordilleras, incluyendo los Andes, donde ha completado descensos extremos en cumbres de más de 6.000 metros.
Además de sus logros en el splitboard, Ana comparte regularmente sus aventuras y experiencias en su perfil de Instagram (@ana_salvador), donde interactúa con una comunidad creciente de seguidores apasionados por los deportes de montaña. Su dedicación y entusiasmo la han consolidado como una referente en el ámbito del splitboard y el montañismo en España.
¿Cómo empezó tu pasión por el deporte?
Mis inicios en la nieve no fueron fáciles. De pequeña, más de una vez tuve una pataleta al salir del coche… Mis padres me apuntaron al club de esquí del valle para aprender, y allí estaba yo, hiciera frío, lloviera o nevara, cada fin de semana a las 9:00 de la mañana.
Aprendimos a esquiar, pero también a hacernos más fuertes. Recuerdo un día en concreto porque lo pasé entero llorando mientras esquiaba porque me dolían los pies. Se lo decía a mi madre, pero ella lo pasaba por alto. Al final del día, nos dimos cuenta de que me había puesto las botas al revés… Eran esas botas de los años 90, que precisamente cómodas no eran.
¿Qué significa para ti ser una atleta mujer en la actualidad?
La verdad es que no me considero una atleta en el sentido tradicional. Más bien, soy una chica que disfruta cada día de lo que más le gusta: la montaña y su movimiento por ella.
No sigo un entreno especifico, ni tengo un objetivo de temporada, más bien me levanto por la mañana y me dejo inspirar por lo que me sugiere el día, una buena bajada en busca de buena nieve con los amigos, un viaje en bici, una escalada o un trekkig.
¿Qué momento de tu carrera recuerdas con más orgullo?
Curiosamente, el momento que más orgullo me ha dado fue la competición que menos importante pudiese ser. Fue en unos Campeonatos de España FIS de paralelo gigante. Acababa de terminar mi TD3 de snowboard y necesitaba acudir a una competición para completar unas prácticas. Así que pensé: "Bah, me saco la licencia, me inscribo y listo ".
Fui con una apariencia bastante distinta a la de mis "rivales” de dentro de la federación, que llevaban chaquetas llenas de parches. Y, para sorpresa de todos, gané las dos competiciones del día. Me entregaron una medalla que decía "Campeona de España".
La "chica de las pintas raras" había ganado. Ese día me hizo darme cuenta de mi propio valor, y cambió el resto de mi vida.
¿Has enfrentado obstáculos o estereotipos por ser mujer en el deporte?
En mi caso, ser mujer me ha beneficiado más que perjudicado. Creo que he tenido más suerte que muchos hombres a la hora de presentar proyectos y conseguir apoyo para ellos.
Eso sí, si no crees en ti misma, da igual que seas hombre o mujer. El verdadero trabajo es potenciarse a uno mismo y sacar lo mejor de cada experiencia.
Aunque, por supuesto, siguen existiendo muchas desigualdades y es importante seguir luchando por la igualdad.
¿Qué consejo le darías a las niñas que sueñan con dedicarse profesionalmente al deporte?
Que no se obsesionen con un objetivo, que disfruten del camino y, sobre todo, que fluyan. Cuando pasen los años, lo que realmente recordarán será la experiencia, no el resultado.
¿Cómo ha impactado el deporte en tu vida fuera de la competencia?
Para mí, el deporte es una parte esencial de mi día a día, como puede serlo tomar un café.
Eso sí, si un día estoy cansada y no hago nada, no pasa nada. Y si en una semana no hago nada, tampoco pasa nada. Lo importante es llevar un deporte sano y equilibrado.
¿Quién ha sido tu mayor inspiración en el mundo del deporte?
Mi madre, que con 74 años sigue saliendo al monte y esquiando cada día.
Y mi hermana, que, a pesar de trabajar ocho horas al día, seis días a la semana, corre carreras de 100 km por montaña.
¿Cómo equilibras tu carrera deportiva con tu vida personal?
A día de hoy, tengo la suerte de poder dedicarme plenamente a la montaña y la nieve. No desde la competición, pero sí en otros escenarios que me llenan cada día más.
¿Cómo crees que el deporte puede ayudar a empoderar a más mujeres y niñas?
Desde luego, el deporte al aire libre nos hace más sanas, más felices y seguras de nosotras mismas.
¿Qué mensaje te gustaría compartir con otras mujeres en este día tan especial?
Chicas, cada una de nosotras es única y especial. Potenciad aquello que os gusta y en lo que sois buenas. No tengáis miedo de probar cosas nuevas por temor a que no se os den bien. ¡Como tú, solo hay una! Quiérete y, sobre todo, diviértete.